Frances

Frances Farmer consigue debutar en la gran pantalla con solo 23 años. Muchos piensan que la carrera que le espera va a ser brillante porque es muy guapa e inteligente. Pero también es una persona poco convencional, algo que en el Hollywood de los años 30 no es muy bueno. Después de un fracaso sentimental, se da a la bebida. Su madre, entonces, decide ingresarla en un hospital psiquiátrico cuyos métodos son bastante cuestionables.