Yo confieso

Michael Logan, un cura en la ciudad de Québec, escucha en el confesionario la confesión de Otto, quien le dice que ha asesinado a un conocido abogado, mientras intentaba robar su casa. Pero cuando la policía acusa a Logan de ser el autor del crimen, este no puede defenderse y ponerles en la pista de Otto, porque su juramento de mantener el secreto se lo impide.