Me voy a comer el mundo

Verónica llega a Varsovia de la mano de Artur, un abogado polaco que le mostrará los pierogi, el plato por excelencia de Polonia. En este viaje, también conocerá a Dorota y la parte más deliciosa de Varsovia probando algunos dulces típicos de la ciudad. Vero también descubrirá el pasado comunista de Polonia y cómo su legado ha influido en su gastronomía. Antes de irse de Varsovia, Verónica probará el cebularz en casa de Sebastián, quien le preparará este tradicional plato con un pan elaborado por él mismo. Tras visitar Varsovia, Vero llega a Lublin junto con Katy, una profesora de español que le enseñará todos los secretos de esta encantadora ciudad.