Comer en carretera

Hoy bajaremos hasta Murcia, donde muy cerquita de la capital te puedes perder en un vergel. La famosa Venta El Peretón nos sorprenderá por los colores de la huerta murciana y por unas cantidades tan sobradas como el cariño que le ponen al viajero. Sus guisos caseros o su pata de pulpo son deliciosos.Subiendo hacia Cataluña, pararemos en Cambrils, donde conoceremos la historia de un restaurante al que la carretera casi parte por la mitad. Los amigos de Mas Gallau no solo sobrevivieron, sino que mantuvieron su histórica esencia con platos tan ricos como el cabrito a las brasas o un buen steak tartare que preparan delante del cliente. Aquí la carta está a la vista. Y si uno llega hasta Cádiz y parte la provincia por la mitad, tiene que parar en la ruta del toro. El asador Los Corzos tiene la rebanada de pan tostado más grande del mundo y, si ya le ponemos manteca colorá con zurrapa?, nos costará dar cuenta de su exquisito rabo de toro. ¡Olé las buenas ventas!